VENENO PARA LAS HADAS (CARLOS ENRIQUE TABOADA, 1984)

Año: 1984

País: México

Duración: 90 min

Director: Carlos Enrique Taboada

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ARGUMENTO

Las historias de brujería que cuenta la cocinera de su casa despiertan la imaginación de la pequeña Verónica, quien presume de que ella misma es una bruja ante su condiscípula Fabiola. Ante la incredulidad de su amiga, Verónica aprovecha una serie de circunstancias fortuitas para convencerla de que ha sido ella quien las ha provocado, valiéndose de sus artes mágicas. La inocencia de estos juegos adquiere un cariz macabro, cuando Verónica insiste en que Fabiola la invite a unas vacaciones en el rancho de su familia, en donde podrá preparar un veneno para las hadas.

COMENTARIO

Veneno para las hadas es la última película que rodó el director mexicano Carlos Enrique Taboada, considerado realizador de culto por medio mundo pero sin el reconocimiento adecuado en su país de origen. Y es que aquello de “nadie es profeta en su tierra” es una de esas tristes y verídicas frases universales cargadas de razón. Taboada, por cierto, dirigió una magnífica cinta de terror llamada “Hasta el viento tiene miedo” que también tengo que revisionar para traeros un análisis, puesto que no tiene desperdicio.

Lo cierto es que tenemos una historia bastante interesante de dos niñas pequeñas, Verónica y Fabiola, ambas procedentes de familias acomodadas mexicanas. Verónica está obsesionada con la brujería y quiere convencer a su amiga de que es una bruja con toda suerte de poderes extraños…  y lo que parecen a simple vista juegos inocentes y cosas de crías, termina mutando en una historia de manipulación, envidia y maltrato psicológico.

Quizá el pecado de este film son las pretensiones de terror que tiene, se trata más bien de un thriller psicológico con un alto componente de suspense, fantásticamente rodada y con un final de los que te dejan el culo torcido.

A ver si me explico, que ésto no sea una película de terror al uso, ni muestre una sola gota de sangre,  no quiere decir que esté libre de generar mal rollo. Más bien al contrario, la tensión que se palpa entre las niñas está construída con una solidez impresionante. De hecho Taboada rueda todos los planos desde el punto de vista de un niño, saliendo los adultos reflejados de cintura para abajo, tal y como se ven en el mundo de los más pequeños. Maravillosas también las actuaciones de las dos protagonistas, bastante creíbles para dos chiquillas de esa edad.

Sin duda podemos hablar de una pequeña joya de culto, prácticamente desconocida en nuestro país, que nos demuestra que con una buena historia que contar y talento detrás de la cámara no son necesarios presupuestos millonarios para hacer una magnífica película.

NOTA: 8,5/10