sábado, 2 de febrero de 2013

DE CINE: DARKNESS DE LEIF JONKER

Año: 1993
País: Usa
Duración: 90 min
Director: Leif Jonker
 
Ficha completa AQUÍ 
                                   ARGUMENTO
Cuando un grupo de chicos vuelve a casa tras un concierto se encuentran con un montón de razones para tener miedo a la oscuridad. De entre las sombras de la noche, irrumpe una legión de vampiros sedientos de sangre humana. Los chicos se arman hasta los dientes con sierras de cadena, machetes, pistolas y agua bendita. Se prepara una batalla campal entre los vivos y los "no difuntos". Cuando esté a punto de amanecer, todas las miradas de la humanidad se dirigirán hacia un rostro que sobrecoge incluso a los muertos.

                                    COMENTARIO
Tengo la sensación de que hoy, queridos lectores de este cutre-blog, vamos a dejar huella en la historia de www.biblio-phagus.blogspot.com con el análisis de ésta peli. Nos metemos en terreno escabroso sin duda, porque estamos camino de desvirgar ese número, el conjunto vacío, el arito... nunca había puesto una nota tan baja pese a que he hecho reviews de todo tipo de basura, pero Darkness se merece la peor calificación existente. Es irremediable.
Siempre he dicho que es muy fácil criticar cualquier manifestación artística, ya sea un disco, un cuadro o como en éste caso, una película; no obstante todo creador merece un respeto por el esfuerzo invertido... aunque creo que me voy a retractar, al menos por una vez. Por el amor de Satán, no se si estamos ante un insulto, una ofensa o una broma, o las tres cosas a la vez.

La desaparecida productora y distribuidora Gorgon Video (de la que alguna vez escribiré un post, pues hay mucho que comentar) fue la encargada de esparcir unas cuantas copias de Darkness por todos los videoclubs y hogares de algún friki despistao a lo largo y ancho de esta tierra de mangantes y chorizos, allá por la primera mitad de la década de los 90. Siempre tuve curiosidad por ella, incluso llegué a buscarla en formato físico, sin resultados satisfactorios. Hasta hace unos días cuando se me encendió una bombillita, esa que permanece aletargada la mayor parte del tiempo, y pensé “hey tronco, que tienes intenné. ¿Y si te la bajas, idiota?” y así nos hemos visto... ojalá nunca lo hubiera hecho, una hora y media de mi vida que nadie me devolverá y que podía haber empleado en actividades harto más productivas, como pintar macarrones con esmalte de uñas, o intentar cazar moscas con palillos al más puro estilo señor Miyagi.
 A ver, por un lado tenemos un tal Leif Jonker, que es un director amateur que no ha hecho nada más que esta puta mierda en toda su existencia. Encima el colega, que se las sabía todas, usó el seudónimo John T. Chance para acreditar el montaje de esta jodida ruina; que para los que no lo sepáis, es el mismo que usó John Carpenter en el montaje de ¨Asalto a la Comisaría del Distrito 13¨. Tuvo que ser “Juan Carpintero” en persona el que salió a comentar que ni conocía esta basura, ni tenía nada que ver con ella. Como director, el tal Jonker será un ñordo del quince, pero no hay duda de que el tío le da un rato al coco; probablemente con la gilipollez ha conseguido más publicidad que de cualquier otra manera.
Lo cierto es que ayer, mientras preparaba la TV para ponerme a ver Darkness, tuve un pálpito que me incitaba a dejarlo en ese instante, que aún era posible, y me pusiera a ver otra cosa. Fue mi instinto de superviviente, que haría enrojecer de vergüenza al mismísimo Bear Grylls y sus dientas insectívoras, lo que me impulsó a presionar el botón de play y aguantar el chaparrón con toda la estoicidad posible.
Recliné el sofá hasta que adoptó la posición del auténtico guerrero del cine cutre, es decir, ni tumbado, ni sentado... para poder dormirse llegado el caso, pero tampoco quedarse frito involuntariamente si al final resulta que el producto es bueno y todo.
Las primeras escenas iban pasando y ya no me quedaba ninguna duda de que aquello iba a ser chungo de verdad, y tendría que recurrir a estímulos externos si quería continuar con tal empresa. Saqué la hierba, el grinder, el librico de papel, un cigarro y el mechero, y lo dispuse todo cuidadosamente y en orden en la mesa de la salita, sintiéndome como un reputado cirujano plástico que está colocando su instrumental antes de comenzar la intervención quirúrgica más jodida de toda su vida.
Con el pimiento ya liado y aspirando el humo con deleite, tenía que reprimir las ansias de tirar la puta tele por la ventana y mandarle un mail al señor Jonker cagandome en su reputísima madre por haber alumbrado a semejante “director”. Aproximadamente a la hora de metraje estaba realmente incómodo, y cuando por fin aparecieron los títulos de crédito me faltaba llorar y flagelarme con el cable de la estufa eléctrica. ¿Qué fue lo que ví? os lo contaré con todo el pesar de mi corazón...

Tenía entendido que Darkness era un absoluto clásico del cine gore de bajo presupuesto y una obra de culto. Todo adorador de la “purria” (gracias por regalarme el término, Dani) que se preciara tenía que haberla visto porque era una pasada y bla bla bla... y una mierda pa vosotros, cinéfilos culturetas de tres al cuarto, que me habéis engañado. Sólo por ser cutre, de bajo presupuesto y con actores más malos que mandar a la abuela a por coca no significa que sea de culto... esperad, esperad, vamos a tomarlo con calma e ir poco a poco, que me enciendo.
Primero, hablemos un poco del presupuesto. Posesión Infernal se rodó con 350.000 dólares y es toda una joya hecha con muy poca pasta. Para Darkness se invirtió la ridícula cifra de 6.000 dólares, que encima no se muy bien en qué coño los gastaron; en actores y maquillaje seguro que no, en localizaciones tampoco, y encima fue rodada en Super 8... repito, ¿en que los gastaron? mi prima de 11 años con la cámara de un móvil y un bote de salsa de tomate hace mejores cosas.

El argumento es tan sencillo que lo vamos a resumir en un par de líneas: una especie de vampiro chungo que llega a un pueblecico pequeño y convierte en vampiro/zombie a todo el que pille por el camino, hasta que se cruza con unos cuantos “jevis” que vienen de ver un bolo y son los que oponen algo de resistencia. No obstante, un superviviente de una matanza anterior del chupasangre de marras irá siguiendo el rastro de cadáveres que va dejando con la firme intención de matarlo. Y yo por lo menos, siempre que recuerdo a un cazavampiros me acuerdo de Blade con sus extractos de ajo, su espada y la equipación de última tecnología. Este notas lo que lleva es una escopeta de cañones recortados y... una botella de dos litros de agua bendita!! y con eso va matando vampiros... acojonante. Joder, una puta pistolita de agua por lo menos, que eso tiene más alcance... y hubiera sido más divertido de ver.
Hay alguna que otra escena gore que se podría medio salvar de no haber sido por la HORRIBLE fotografía, vale que Darkness signifique oscuridad, pero coño, ¡la mayoría de los planos son tan oscuros que casi no se ve a nadie! que sea una “película” de vampiros no es óbice para tamaña falta de luz.

Y qué decir de los actores... colegas, vecinos y familiares del director, me juego los cojones a que ninguno cobró por ello, porque tampoco lo merecía. Interpretaciones soporíferas y nada verosímiles, lo más triste que he visto en mi vida. No se salva ni uno!!
Para algo que me podría gustar, la banda sonora, suena a un volumen tan bajo y distorsionado que casi no se aprecia, y es una lástima porque son temas de thrash y death metal. Pero vamos, que si quiero oír música me pongo un disco, tampoco habría salvado mucho el tema llegado el caso...
Pues ala, ya me he quedado tranquilo. No veáis esta mierda, no la compreis, ni siquiera la descargueis porque no vale la pena. Encima he llegado a leer por ahí comparaciones de Leif Jonker con el maestro alemán del ultragore Olaf Ittenbach, y por la memoria de Paul Naschy, es lo más absurdo que he llegado a ver nunca.
Pasad de Darkness como de una gonorrea, en serio...

NOTA: 0/10

 

3 comentarios:

  1. Si un clásico de culto si que es, si. Pero del cine más abyecto... jajajaja! Yo la vi cuando salió en VHS en España, allá por los 90. Y también necesité de "agentes" externos para acabar de verla.

    El tal Lief Yonker este es como un J R Bookwalter de la ultra serie ZZZZZZ... pero en cutre.

    Muy divertida tu review, si señor.

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  2. Raúl, siempre he sentido cierta envidia por los que pudisteis disfrutar de todos los clásicos que me molan cuando salieron, pero este no es el caso. Tuve que tomarme la review con humor, porque si no... madre mía. Un fuerte abrazo mister!!

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  3. Pues a mi me divirtió. Está claro q es malisima. Pero tiene momentos gore buenos.

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